Entrena a tu mascota
Entrenamiento para el hogar
- El hogar: entrenamiento
- Cuando lleves un nuevo perro o una nueva mascota a casa, debes establecer y comenzar una rutina lo antes posible. Cuanto más rápido pongas las cosas en orden, menos problemas tendrás que solucionar. Existen diferentes estrategias para entrenar en casa a un cachorro o un perro adulto. Las siguientes son algunas buenas formas para enseñar a tu perro a hacer sus necesidades fuera de la casa.
- Entrenamiento en casa paso a paso.
La cantidad de tiempo que necesites es variable. Al aplicar horarios, establecer límites para el sitio donde puede hacer sus descargas, fijar órdenes verbales, felicitar y usar la casita de entrenamiento, verás el progreso con el paso del tiempo. Si no observas ningún avance, consulta con tu veterinario, un entrenador de perros calificado o un experto en comportamiento canino.
- Idealmente, el entrenamiento en casa debe hacerse junto con el entrenamiento en casita.
- Establece un lugar afuera para hacer las necesidades. Eso evita la indecisión durante el paseo.
- Cuando creas que tu perro necesita salir (muestra señales como las de olfatear el piso, después de estar entrenado, llora o busca la puerta), ponle la correa y llévalo al lugar que le has enseñado.
- Elige una frase como “Hacer pipí” o “Vamos afuera” y dila, con calma, cuando tu mascota esté haciendo sus necesidades. Felicita al perro y dale una galleta cuando termine. Con el paso del tiempo, relacionará estas palabras con sus acciones y tendrás un perro que obedece una orden.
- Durante el periodo de entrenamiento, vigila a tu mascota tanto como sea posible. Si empieza a orinarse frente a ti, interrúmpelo y llévalo a un lugar adecuado rápidamente. Prémialo por terminar de hacer sus necesidades en el sitio correcto.
- Mediante la repetición, el perro aprende que hay un lugar adecuado para descargar y cuando necesite hacerlo, te avisará.
- Mantén un horario regular de alimentación y evacuación. Sigue una rutina para sacar al perro a hacer sus necesidades alrededor de quince a treinta minutos después que haya comido.
- Durante este periodo, tu perro deberá estar en su casita o bajo supervisión. Los cachorros y los perros jóvenes deberían evacuar poco después de comer.
- ¿Qué hago cuando mi perro se comporta incorrectamente?
Todos los perros cometen errores cuando empiezan su entrenamiento. Revisa las situaciones e intenta determinar la causa; esta puede ser señal que el perro no sabe qué es aceptable. Como su entrenador, debes encontrar la causa de la confusión y resolverla.
- Cuanto más joven es un cachorro, necesitará evacuar con más frecuencia. Un cachorro de dos meses puede necesitar hacerlo cada dos horas, físicamente no puede aguantar más de ocho horas. A medida que crece y su sistema digestivo madura, el tiempo entre las evacuaciones aumentará.
- Demasiada libertad con demasiada frecuencia es el error más común. Aunque algunos cachorros pueden entender el concepto de evacuar afuera en unas semanas o incluso días, tendrás que reforzar este comportamiento durante varios meses antes que tu mascota sea 100% confiable. Si tu perro hace sus necesidades donde no debe una o dos veces, es probable que no estés supervisando lo suficiente.
- Conseguir una casita que sea demasiado grande para tu perro, lo llevará a hacer sus necesidades en un extremo y dormir en el otro.
- No golpees a tu mascota. Los perros no entienden cuando los golpean o agarran con fuerza. No podrá relacionar el castigo con un error pasado y creerá que estás enojado sin ninguna razón; posiblemente se sentirá temeroso y confundido.
- Cambiar la dieta de tu perro puede causarle alteraciones digestivas que podrían ocasionar accidentes. Alimentarlo por la noche sin sacarlo a evacuar, también.
- Incluso los perros bien entrenados pueden equivocarse al hacer sus necesidades. Limpia el área con un neutralizador de olores, y tu mascota no estará tentada a repetir el error. No uses productos con amoníaco porque huelen parecido a la orina de los perros y los atraerá.
- Si tu perro bien entrenado comienza a tener accidentes, puede ser porque no tiene suficientes oportunidades para salir y evacuar, porque no le estés dando la atención debida a sus señales, o es posible que tenga problemas de salud. Consultá con el veterinario si el problema persiste.
- Busca marcas territoriales: pequeños rastros de orina en diferentes objetos. La esterilización de hembras o machos puede detener este comportamiento, también existen pañales especialmente diseñados para este fin. Recuerda supervisar a tu perro y haz que se detenga si empieza a marcar; luego, limpia el área cuidadosamente.
- Arena de entrenamiento: una alternativa para el entrenamiento del hogar
Los cachorros necesitan aprender cuándo y dónde hacer sus necesidades. Es una etapa normal de su vida que la mayoría de los cachorros pasan rápidamente y sin mayor problema.
Existen métodos diferentes para el entrenamiento en casa. Algunos dueños de mascotas tratan de entrenar a sus perros usando papel periódico o telas absorbentes mientras son pequeños, y cuando crecen les enseñan a salir a la calle. Un método innovador para los perros más pequeños incluye el uso de arena, al usar arena, se puede entrenar fácilmente a un cachorro o un perro (de hasta 15 kgs.) para hacer sus necesidades en un sitio específico dentro de la casa, disminuyendo la necesidad de sacarlo a mitad de la noche, cuando hay mal tiempo y evitando encontrar suciedad donde no lo deseas. También es una buena opción para los residentes de apartamentos.
Sea que decidas realizar entrenamientos dentro o fuera de casa, debes establecer una rutina tan pronto como sea posible. Cuanto más tiempo permitas que un comportamiento persista, más difícil será cambiarlo.
- Casita para tu perro: Entrenamiento
- ¿Dónde prefiere tu perro dormir un rato: debajo de una mesa, un escritorio o sobre un abrigo? Los perros se sienten seguros en un sitio pequeño y encerrado ya que probablemente sea como una guarida para ellos. Vos podés recrear esa sensación y desarrollar un ambiente de entrenamiento saludable con una casita de entrenamiento.
Entrenamiento para la casita
- A los perros les gustan los espacios pequeños y cerrados por la sensación de seguridad que les ofrece; tener a tu perro en una casita no es “encasitar” al animal. Este método de confinamiento nunca deberá utilizarse como castigo. Sirve para definir la preferencia del animal por espacios pequeños y es una medida adicional de control sobre él. Si practicas el entrenamiento preventivo, tu perro pasará el tiempo en la casita cuando no estés cerca para fijar límites.
Las casitas son útiles cuando enseñas a tu perro a hacer sus necesidades en el lugar indicado. Los perros tratan de no hacer sus necesidades en el mismo lugar donde duermen. Si dejas al perro en la casita mientras no están entrenando, tratará de aguantarse hasta que lo dejes salir. Tu trabajo es mantener un horario razonable con muchas oportunidades para que tu mascota haga sus necesidades y juegue.
- ¿Como elijo una casita?
Las casitas son útiles cuando enseñas a tu perro a hacer sus necesidades en el lugar indicado. Los perros tratan de no hacer sus necesidades en el mismo lugar donde duermen. Si dejas al perro en la casita mientras no están entrenando, tratará de aguantarse hasta que lo dejes salir. Tu trabajo es mantener un horario razonable con muchas oportunidades para que tu mascota haga sus necesidades y juegue.
Si compras una casita cuando es un cachorro, necesitarás dos casitas de diferente tamaño o una con un separador que puedas desplazar para ampliar el área interior, a medida que tu cachorro crece.
Si tu perro está pasando por la etapa de masticación, haz que la casita sea cómoda con una manta o almohada. Su casita debe ser un lugar donde a tu perro le agrade pasar el tiempo. No dejes que muerda la cama; algunas mascotas nunca lo hacen y otras sí. Nunca uses en la casita nada que pueda atragantarlo.
- ¿Cómo practicar el entrenamiento de la casita?
- Lleva al perro a la casita en una situación de baja presión, no cuando vayas a salir. Deja la puerta abierta y permite que el animal explore.
- Antes de meter a tu mascota en la casita, quitale el collar..
- Si el cachorro se atemoriza por el ruido de una casita metálica sobre un piso duro, puedes poner debajo una toalla o tapete para amortiguar el ruido.
- Ensaya poniendo un bocadillo en la casita, puede ser un trozo de galleta, y luego utiliza una palabra sencilla como “Casita” o “Entra” para hacer que el perro entre.
- Felicítalo y cierra la puerta. Después, abrela por unos momentos.
- Aumenta lentamente el tiempo que el perro pasa en la casita con la puerta cerrada.
- No abras la puerta porque se ponga a llorar. Si lo haces, tu perro aprenderá a llorar más.
- Una regla general para determinar cuánto tiempo puede pasar tu mascota en la casita es una hora por mes de edad, más una hora. Por ejemplo, los cachorros de más de tres meses pueden permanecer en la casita cuatro horas.
- NO encierres a tu perro por más de ocho horas. No es justo dejar a un perro sin salir para hacer sus necesidades o ejercicio por un tiempo mayor.
- Cuanto más tiempo pase tu perro encerrado, más ejercicio necesitará hacer diariamente. La casita es una herramienta que nunca se debe utilizar para evitar el entrenamiento, el ejercicio o pasar tiempo con tu mascota.
- Mantén un horario regular de paseos, así tu mascota puede descansar; y para que el paseo sea tranquilo, llévalo siempre con su correa, al mismo lugar.
- ¿Qué es el adiestramiento preventivo?
- El adiestramiento preventivo le enseña a tu perro qué no hacer de una manera muy sencilla: ¡no dejando que suceda en primer lugar!
La idea es simple:evita dejar a tu perro solo en donde pueda meterse en problemas. Con este método, aprenderá cuales actividades sí están permitidas sin aprender aquellas que están prohibidas. Es más fácil enseñarle a tu cachorro a mordisquear sus juguetes que enseñarle a dejar de mordisquear tu sofá.
Si tu perro se queda solo y realiza acciones no deseadas, probablemente crea que esas acciones están bien porque disfruta hacerlas y no hay nadie ahí que corrija su comportamiento. No deberás corregir al perro después del hecho; no relacionará una corrección con algo que hizo horas, minutos o incluso segundos atrás. Hasta que atrapes a tu perro en pleno acto, el comportamiento no deseado se refuerza cada vez que lo repite.
Práctica del entrenamiento preventivo
Antes que nada, planea dedicar mucho tiempo con tu perro durante los primeros meses y asegúrate de contar con un lugar especial para tu perro.
- Mantén a tu perro en la habitación en la que tú estés y desparrama varias juguetes masticables.
- Si tu perro está a punto de causar problemas, distráelo con un juguete y felicítalo cuando lo toma.
- Si ya está causando problemas, interrúmpelo con un firme “¡No!”. Cuando se detenga, ofrécele un juguete y felicítalo por su interés en él o impártele una orden de obediencia y felicítalo por obedecerla.
- Cuando no puedas estar cerca de él, mantén al perro recluido en su lugar especial de la casa, puede ser un corralito o una pequeña área acondicionada para su seguridad.
De esto se trata el adiestramiento preventivo. Es muy simple y si se ejecuta en forma correcta es sumamente eficaz porque no permite que se creen malos hábitos, y no necesitarás corregirlos posteriormente. Además, ayuda a construir un vínculo fuerte entre tú y tu perro.
- ¿Qué hacer y qué no hacer?
- SÍ utiliza el tono de voz correcto para comunicarte: más agudo para elogios y felicitaciones, práctico y natural para las órdenes, tonos más bajos para demostrar desagrado.
- NO le pegues a tu perro. Los perros y los cachorros no comprenden cuando les pegan o los agarran fuertemente. Sólo aprenderán que no pueden confiar en ti y a temerte, dificultando aún más su adiestramiento.
- SÍ genera oportunidades para hacer ejercicio físico diariamente para que tu perro pueda gastar energía de la forma apropiada.
- SÍ felicita con frecuencia a tu perro cariñosamente por hacer lo correcto. Esto lo ayudará a tomar las decisiones correctas en el futuro y además, ¡es divertido!
- Empieza con el pie derecho
Ni bien lleves tu cachorro a tu hogar, deberás crear el hábito de siempre recompensar los comportamientos correctos en cuanto suceden (incluidos los momentos en los cuales el perro esté sentado o echado tranquilamente), brindándole elogios y felicitaciones, cariño o incluso croquetas de alimento. La recompensa ayudará a tu cachorro a aprender los comportamientos aceptables mucho antes y sentará las bases de experiencias de aprendizaje placenteras en el futuro.
- Las Festividades
- Las festividades son muy divertidas para las personas y también pueden serlo para los perros. Es importante tener en cuenta algunos temas de seguridad para tu próxima reunión festiva. Cuando tú y tu familia se reúnen para celebrar, incorpora a tu perro de una manera que sea prudente y también divertida.
Alimentos
Muchas reuniones involucran maravillosas comidas y alguien pueden sentir la tentación de deslizarle a tu perro algún alimento pequeño a modo de golosina festiva. Evita darle a tu perro “alimentos para personas” ya que podrían provocar malestar en su estómago, causarle un posible atragantamiento o crear el hábito de pedir en la mesa todo el año. Es mejor que le demuestres mucho amor y cariño antes o después de la hora de la comida.
Adornos y envoltorios
Algunos perros son conocidos por mordisquear. Hilos, guirnaldas, cintas y otros “masticables” son atractivos para un perro juguetón pero pueden causar daños internos si son ingeridos. Si no puedes supervisar a tu cachorro o perro, asegúrate que esté en un área segura. Cómprale algunos juguetes masticables apropiados como una sorpresa especial para las festividades.
Dulces
Las mascotas, al igual que las personas, pueden tentarse con las cosas ricas de las festividades. Permitir a tu perro que coma de esas golosinas y dulces puede ocasionarle malestares digestivos. Nunca le des a tu perro cosas ricas de chocolate; el chocolate contiene teobromina, que es tóxico para los perros. Asegúrate de tener a mano algunas golosinas favoritas de tu perro para que él también pueda disfrutar de algunas cosas ricas.
Las festividades son momentos emocionantes para ti, tu familia y tu perro. Pero recuerda que pueden resultar estresantes para las mascotas. Más personas, más ruido y cambios en sus programas diarios pueden asustarlas o confundirlas. Hacer participar a tu perro en las actividades festivas puede ser divertido, pero asegúrate de establecer algunos límites y tomar precauciones para permanezca feliz y saludable durante las festividades.
- Quiero sacar una buena fotografía de mi perro pero no se queda quieto...¡Ayuda!
- Fotografiar a tu perro puede ser muy divertido, pero obtener una foto excelente puede resultar difícil. Para lograrlo, necesitarás toda su atención. Aquí encontrarás algunos consejos prácticos para ayudarte a captar esos momentos divertidos y adorables con tu cámara.
- Encuentra un asistente, puede ayudar a mantener la atención de tu perro, ¡especialmente si viene con juguetes o golosinas!
- Las fotos de acción son divertidas, pero una mascota que se mueve con rapidez puede hacer que tu foto sea borrosa. Para una mejor toma, presiona el disparador de tu cámara cuando tu mascota se encuentre alerta pero quieta, o busca la función correcta de tu cámara para “congelar” la imagen de tu perro en movimiento.
- Para hacer que mire a la cámara, haz un ruido (como un silbido) para atraer su atención. ¡Estate preparado para tomar la foto cuando te mire!
- Cuando se trata de la iluminación, la mejor opción es fotografiar al aire libre con la suave luz del día. Si decides tomar fotografías en un lugar cerrado, elige uno con mucha luz natural.
- Escoge un fondo que contraste con el pelaje de tu mascota. Por ejemplo, un pelaje oscuro contra un fondo de colores claros generará una imagen más espectacular.
Puede requerir algo de práctica pero finalmente ¡capturarás esa foto perfecta de tu mascota! Sólo recuerda ser paciente y divertirte mientras lo haces. ¡A veces las fotos más impensadas resultan ser las mejores!
Entrenamiento General
Antes de que tu perro pueda aprender, tú debes aprender a entrenar a tu mascota. Aquí te damos algunos consejos sobre como comunicarte con tu mascota y te acercamos algunas herramientas para que puedas usar. Una vez que sepas como entrenar a tu mascota y las indicaciones a las que tu perro responderá, te darás cuenta que los comandos en sí –siéntate, junto, etc. – son más fáciles de lo que crees.
- El "ABC" del entrenamiento
El adiestramiento implica enseñarle a tu perro cómo ser un mejor compañero canino. La clave del éxito de cualquier adiestramiento, ya sea "Siéntate", "Busca" o enseñarle dónde hacer sus necesidades, radica en unas pocas herramientas básicas. Úsalas como base de todo el adiestramiento.
- La motivación de tu perro
Los perros son animales sociales y están naturalmente adaptados a vivir en un grupo. Como dueño, es tu responsabilidad enseñarle a tu perro las reglas que debe seguir. A medida que demuestres liderazgo, coherencia y estructura, tu perro comenzará a verte como aquel que establece las reglas. Muy a menudo durante el adiestramiento, las personas reprenden a su perro cuando hace algo mal pero no brindan un refuerzo positivo cuando hace algo bien. Motiva a tu perro para que siga las reglas dejando en claro que estás feliz cuando él se comporta bien mediante tu tono de voz, caricias y felicitaciones.
Si tu perro necesita un poco más de motivación que felicitaciones, también está bien. Utilizar una croqueta de alimento para recompensar un trabajo bien realizado o arrojarle su juguete favorito puede ayudar a algunos perros a aprender con mayor rapidez y responder más sistemáticamente.
- Sé un líder
Actúa como líder y tu perro te tratará como uno. Lee nuestra información acerca del liderazgo efectivo y las acciones que puedes realizar para lograrlo.
- ¿Cúando comenzar con el adiestramiento?
Comienza a adiestrar a tu perro desde que ingresa a tu hogar y muéstrale cómo comportarse. No cometas el error de esperar hasta que sea lo suficientemente grande, le dará tiempo para aprender comportamientos incorrectos.
¿Acabas de adoptar un perro adulto? No creas que será difícil que cambie viejas mañas; de hecho, los perros pueden aprender reglas, trucos y nuevos juegos en su plena adultez. Si posees un perro de edad avanzada que ha sido bien educado toda su vida pero luego comienza a tener problemas, visita al veterinario antes de culpar a tu perro. No debes reprenderlo por cosas que ya no puede evitar.
Sea que decidas realizar entrenamientos dentro o fuera de casa, debes establecer una rutina tan pronto como sea posible. Cuanto más tiempo permitas que un comportamiento persista, más difícil será cambiarlo.
- Sé coherente
La mejor manera para que tu perro aprenda es si existe una conexión clara y coherente entre sus acciones y tu reacción. Cuando le enseñes “Siéntate”, ofrécele una recompensa tal como un juguete favorito, una croqueta de su alimento o felicítalo cada vez que lo hace bien. Si no quieres que tu perro esté sobre los muebles, dile “No” y guíalo abajo cada vez que se sube. Luego, felicítalo cada vez que coloque sus cuatro patas en el suelo. Hazlo bien claro o se confundirá. Si no eres coherente, tu perro tampoco lo será.
- Recompensas con alimentos
No regales ni abuses de las recompensas. Haz que tu perro se gane cada una de ellas, aunque sea sólo por un “Siéntate”. Para ayudar a controlar la ingesta calórica, muchos nutricionistas recomiendan que utilices croquetas de alimento como recompensa cuando sea posible.
En el adiestramiento, debes trabajar intensamente en no ofrecerle una recompensa con alimentos todo el tiempo. En forma gradual, comienza a reemplazarla por elogios o felicitaciones. Una vez que tu cachorro haya aprendido una orden, ofrécele la recompensa una vez por medio, luego cada tres veces, nunca escatimando en elogios. Muy pronto, tu cachorro trabajará por el elogio o la felicitación y la muy ocasional recompensa en alimento.
- Correción
Los perros no son rencorosos. Si tu perro está haciendo algo malo, puede haber entendido que era correcto hacerlo y tú debes enseñarle lo contrario. En primer lugar, atrápalo en el acto, los perros no relacionan el castigo con una acción que sucedió horas o incluso minutos atrás; y nunca le pegues. Cuando veas a tu perro haciendo algo malo, dile “No” con un tono de voz severo. Cuando tu perro se detiene, felicítalo y ordénale alguna acción como “Siéntate” o “Ven”. Luego, felicítalo por responder.
Recuerda: el adiestramiento no tiene que ser severo. Existen muchos métodos diferentes, busca uno que tenga sentido para ti y lo ayude a tu perro a aprender. Casi siempre existe otra manera de enseñarle algo a tu perro. Si el método que estás empleando no está funcionando, prueba con otro antes de sentirte frustrado.
- ¿Qué hacer y qué no hacer?
- SÍ emplea más recompensas y menos castigos.
- SÍ recompensa los comportamientos correctos en cuanto sucedan, incluso si se producen fuera de una sesión formal de adiestramiento.
- SÍ termina las sesiones de adiestramiento con una nota positiva para ti y para tu perro.
- NO emplees alimentos como tu única forma de recompensa. Los elogios y las felicitaciones pueden ser tan eficaces como los alimentos.
- NO olvides tener paciencia y divertirte.
- La motivación de tu perro
Las cuatro órdenes de obediencia básicas que todo perro debe saber son: sentado, quieto, echado y aquí; si planeas sacar al perro con correa, también querrás añadir “Al pie” a esta lista. Seguir paso a paso estas órdenes y recordarlas es simple pero debes tener en cuenta que todos los perros son diferentes. Existen muchos métodos de entrenamiento para ensayar. A continuación te presentamos algunas indicaciones básicas que han ayudado a muchas personas. Si tú necesitas algo diferente, busca la asesoría de un entrenador calificado o de un profesional. A la mayoría de los perros se les entrena fácilmente, cuando sabes cómo hacerlo. Sentado
Puedes empezar a trabajar la orden “Sentado” con cachorros desde siete semanas de edad.
- Comienza por llamar la atención de tu perro diciendo su nombre y luego la orden: "Max, sentado".
- Con suavidad ayúdalo a sentarse. Sé amable. Tu mascota está aprendiendo, no es mala.
- Prémialo con una galleta o una croqueta de su alimento por sentarse. Dale el premio aunque le hayas ayudado al comienzo. Quieres enseñarle que sentarse siempre es algo bueno.
- Cuando comiences el entrenamiento de tu perro, prémialo tan pronto toque el piso. Debes estar listo. Estás tratando de crear una conexión entre la orden verbal “Sentado” y el premio, pero el perro todavía no lo sabe. Asegúrate que el mensaje sea claro. A medida que tu mascota mejore, aumenta el tiempo que permanece sentado antes de darle el premio.
- Repite el ejercicio con frecuencia. Una o dos sesiones de entrenamiento de cinco minutos diarios, pueden funcionar de maravilla.
- Una vez que haya aprendido, haz que el perro se siente para lo que quiera, desde una golosina hasta una puerta abierta. Esto te convertirá en un buen líder y te dará mucha práctica en la vida real.
- Quieto
Has comenzado a enseñar a tu cachorro a sentarse, pero no lo hace por mucho tiempo, y la mayoría de las veces sólo lo hace para ganarse un premio. Ahora, debes entrenarlo para que se quede en un lugar.
- Después de que hayas conseguido que tu mascota se siente, pon tu mano frente a su cara y dale la orden: “Max, quieto".
- Gira lentamente y camina frente a él.
- Si tu cachorro se levanta, vuelve a la orden “Sentado”.
- Después de unos segundos, felicítalo con calma y dile “Bien”. Deja que se levante.
- Repite hasta que tu mascota permanezca sentado por un buen tiempo.
- Ahora, trata de retroceder un paso o dos. Si te sigue, comienza de nuevo, aumentando gradualmente la distancia.
- Repite hasta alejarte varios pasos mientras tu mascota permanece sentada.
- Recuerda felicitarla, pero con calma. Demasiado entusiasmo la emocionará y hará difícil que permanezca sentada.
- Echado
Después de que hayas enseñado a tu perro a sentarse, permanecer quieto sigue como algo natural. Esta orden puede resultar útil cuando tu mascota se dirige a donde no debe ir.
- Ordénale que se siente.
- Sostén una galleta frente a su nariz.
- Baja la galleta hasta el piso y muévela frente a las patas delanteras del animal como si trazaras una “L”. Con la comida en la mano, es probable que el animal la siga.
- Cuando el perro se eche en el piso, dile “Echado” y prémialo.
- Repite con frecuencia.
Aquí
"Aquí" es esencial para todos los perros. Y es una de las maneras clave para mantener a tu mascota bajo control, segura y lejos de los problemas.
- Ponle el collar al perro.
- Aléjate algunos pasos con una galleta o un juguete en la mano. Debes dejar al perro sentado y echado para alejarte.
- Gira, dile la orden “Aquí” y ¡prémialo! Si es necesario, usa la correa para acercar al perro.
- Felicítalo y prémialo cuando llegue a donde estás.
- Aumenta la distancia y retira la correa cuando creas que el perro ha aprendido la orden.
- La hora de la comida es un buen momento para reforzar el entrenamiento de “Aquí” y “Sentado”. Cuando sea la hora de comer, llama a tu mascota y ordénale que se siente antes de poner el tazón de comida en el piso. Busca otros momentos cuando estas órdenes pueden ser útiles para ti y para tu perro, y úsalas de acuerdo con ello.
- No lo regañes ni uses un tono amenazante; puede pensar que estás furioso. Si te enojas, acercarse será lo último que quiera hacer.
- Al pie/Junto
Lo ves con mucha frecuencia: un perro llevando a su dueño. Enséñale al perro a caminar a tu lado usando la orden "al pie".
- Si puedes, quema el exceso de energía jugando con tu mascota antes de salir a caminar.
- Empieza llamándolo por su nombre y dile “Al pie”, sujetándolo con la correa de manera que el hombro derecho del animal quede alineado con tu cadera izquierda.
- Afloja la correa gradualmente. Cuando el perro tire para adelantarse, repite la orden y haz un giro a la derecha. Cuando se encuentre detrás de ti, correrá para alcanzarte.
- Felicítalo con afecto cuando te alcance.
- Debes estar atento al aburrimiento manteniendo a tu mascota ocupada. Háblale, haz que se siente, que permanezca quieto o que se eche.
- Si se adelanta, para y haz que se siente. Reinicia la caminata y repite “Sentado” cuando sea necesario.
- También puedes trabajar con tu mascota haciendo pequeños círculos en el sentido de las agujas del reloj. Esto lo anima a prestar atención.
- Muchas personas necesitan tomar una o dos clases de entrenamiento para conseguir realmente que se quede sentado al pie. Una clase divertida y bien dirigida es una forma estupenda de socializar y entrenar a tu compañero canino.
- Señales manuales de adiestramiento
Las señales manuales son fáciles de enseñar y fáciles de aprender para la mayoría de los perros. Todo lo que necesitas para empezar son unas cuantas galletas. Hay muchas formas de enseñarle las señales manuales. A continuación, te presentamos uno de esos métodos.
Lo primero que debes hacer es lograr que tu perro asocie un gesto con tus órdenes verbales; las siguientes son algunas. A partir de ahí, sólo es cuestión de repetición.
Supongamos que tu perro ya conoce la asociación entre una orden verbal (“Sentado”) y la acción que quieres que realice (sentarse). Ahora debes crear una nueva asociación entre una señal manual desconocida, la orden verbal y la acción que el animal ya conoce. Para empezar, relaciona la orden verbal con una señal manual (ver más adelante ejemplos de señales manuales comunes). Cuando el perro realice la acción correcta, refuérzale este comportamiento con una galleta. Tendrás que repetir esto tantas veces como sea necesario para asegurarte que tu mascota entiende la asociación.
Mientras sigues usando la galleta, elimina gradualmente la orden verbal. Durante un tiempo podrías usar la orden verbal y la orden gestual la mitad de las veces y solamente la orden gestual, la otra mitad.
Cuando tu mascota haya aprendido a reaccionar ante una orden sólo gestual dándole una galleta, empieza a retirarle esa galleta gradualmente. Pronto, tu perro se sentará, se echará o se acercará ante un movimiento de tu mano. Sentarse
Empieza con el perro parado frente a ti. Con un trozo de galleta en la mano, levanta el brazo lentamente doblándolo por el codo, como si fueras a lanzar algo. Hazlo despacio, pasando la galleta cerca de la nariz del perro y al mismo tiempo, dile “Sentado”. Haz que levante la nariz en el momento en que le dices “Sentado”. Cuando se siente, felicítalo y dale la galleta.
- Echarse Empieza con el perro sentado frente a ti. Levanta la mano por encima de tu cabeza, sujetando un trozo de galleta y luego baja la mano con el brazo estirado hasta dejarlo a tu lado. Hazlo despacio, pasando la galleta por la nariz del perro y al mismo tiempo, dile “Echado”. Haz que baje la nariz en el momento que le dices “Echado”. Cuando se eche, felicítalo y dale la galleta.
- Quieto
Comenzaste a enseñarle a tu cachorro a sentarse, pero no lo hace por mucho tiempo, y la mayoría de las veces sólo lo hace para ganarse un premio. Ahora, debes entrenarlo para que se quede en un lugar.
- Después de que hayas conseguido que tu mascota se siente, pon tu mano frente a su cara y dale la orden: “Max, quieto"..
- Gira lentamente y camina frente a él.
- Si tu cachorro se levanta, vuelve a la orden “Sentado”.
- Después de unos segundos, felicítalo con calma y dile “Bien”. Deja que se levante.
- Repite hasta que tu mascota permanezca sentado por un buen tiempo.
- Ahora, trata de retroceder un paso o dos. Si te sigue, comienza de nuevo, aumentando gradualmente la distancia.
- Repite hasta alejarte varios pasos mientras tu mascota permanece sentada.
- Recuerda felicitarla, pero con calma. Demasiado entusiasmo la emocionará y hará difícil que permanezca sentada.
- Acercarse
Empieza con el perro parado frente a ti. Estira un brazo al lado, de modo que quede paralelo al piso, con un trozo de galleta en la mano. Lleva el brazo hacia adelante, para llevar la mano hasta el hombro opuesto. Al comienzo, hazlo lentamente, pasando la galleta por la nariz del perro y al mismo tiempo, dile “Aquí” y retrocedes algunos pasos. Cuando el perro se acerque, felicítalo y dale la galleta.
- Programas de rutina para tu perro
- Dado que los perros son animales de costumbre, los programas son muy importantes. Necesitas programar cuándo alimentar a tu perro, cuándo hacer ejercicio y cuándo dejarlo salir para que descargue.
- ¿Por qué programar?
Los programas hacen feliz a tu perro, saber qué sucederá y cuándo sucederá le da una sensación de seguridad. Además, los programas facilitan el adiestramiento y el control de tu mascota. El proceso de educación para que tu perro aprenda a hacer sus necesidades en los lugares apropiados normalmente se facilita con un programa, junto con la supervisión y el estímulo.
- Programa la alimentación
Alimenta a tu perro con la misma cantidad de comida a la misma hora todos los días, ya sea que lo alimentes una vez al día o más. Después de 15 minutos, retira todo el alimento que no comió. Siempre debes dejar a su disposición agua fresca.
Si sabes cuándo tu perro come y bebe, tendrás una buena noción de cuando necesitará salir. También estarás entrenando su sistema digestivo, el cual ayudará a eliminar algunas suposiciones del adiestramiento para hacer sus necesidades.
- Programa las descargas
Recuerda el adiestramiento preventivo: siempre es mejor anticiparse. Sal con tu perro cuando creas que él necesite descargar, en vez de esperar demasiado y correr el riesgo que tenga un accidente dentro de tu hogar. Cuantas más veces tu perro descargue afuera donde tú quieres, la probabilidad de que sufra un accidente dentro del hogar es menor. Cuanto más clara es la situación para el perro, más rápido asimilará lo que tú quieres. Los perros verdaderamente quieren complacerte y tú puedes demostrarles cómo hacerlo.
Siempre acompaña a tu perro cuando salga. De esa manera, puedes llevarlo a un área preseleccionada y eliminar el hábito de olfatear todo el lugar para encontrar el área deseada. También te asegurarás que tu perro haya descargado antes que entre a la casa y tendrás la oportunidad de felicitarlo.
- Programa las descargas de tu cachorro
Los cachorros necesitan salir con frecuencia. A las 8 semanas de edad, se sugiere una salida al exterior cada dos a 3 horas durante el día. Para los 4 meses, puede ser aproximadamente cada 4 ó 5 horas. La mayoría de los cachorros pueden pasar toda la noche sin salir para cuando tienen alrededor de 4 meses. A los 9 meses más o menos, los perros en su mayoría pueden estar cómodos con 3 ó 4 salidas al exterior por día, aunque cuantas más veces, mejor.
- Programa el ejercicio y el juego
El ejercicio es importante para todos los perros. Muchos perros adultos tienen sobrepeso debido a un exceso de alimentación y/o falta de un programa de ejercicios. La falta de ejercicio apropiado puede hacer que los perros mordisqueen cosas destructivamente porque se aburren o intentan gastar el exceso de energía. Llevar a tu perro a caminar durante quince a veinte minutos varias veces a la semana puede ayudar a socializarlo, te brinda la oportunidad de fortalecer el vínculo con él y es una excelente manera de que tú también hagas algo de ejercicio.
- Aprende sobre los cursos de agilidad
- Existen numerosos recorridos de agilidad que puedes hacer con tu perro adulto para obtener diversos títulos.
- Recorridos
- Recorrido estándar: Incluye saltos y “obstáculos de contacto”. Estos obstáculos (empalizadas, pasarelas y balancines) requieren que el perro dé con zonas de contacto pintadas en ciertos puntos. Por la seguridad del perro, desalienta los saltos riesgosos para subir o bajar de los obstáculos.
- Saltador con eslalon: Es un recorrido de saltos con un grupo de “postes de eslalon” que el perro debe esquivar zigzagueando en un patrón específico.
- Niveles de competición
- Nivel principiante: Los recorridos tienen menos obstáculos y los perros tienen más tiempo para completar tales recorridos.
- Nivel abierto: Los perros tienen más para hacer en menos tiempo.
- Nivel excelente: Los recorridos son los más complejos, con la mayor cantidad de obstáculos para sortear en la menor cantidad de tiempo. En el nivel Excelente, se espera que los perros cubran 2,2 – 2,7 mts. por segundo.
- Independientemente del recorrido que se haga y de cuál sea la organización, las pruebas de agilidad siempre son muy divertidas para todos, ¡adiestradores, perros y aficionados!
- ¡Paseá a tu perro usando la correa!
- Los perros necesitan sentirse cómodos caminando con una correa. Desde un punto de vista práctico, una correa significa control y seguridad. También puede significar calidad de tiempo para ti y tu mascota.
- ¿Por qué es necesario el uso de la correa?
Hay muchas razones para que quieras que tu perro se sienta cómodo con una correa.
- Evita que se escape durante una caminata.
- Te permite controlarlo cuando se emociona o agita.
- Es una herramienta que puedes usar en el entrenamiento en casa, para aprender la orden “Aquí” u otras lecciones.
- En muchas zonas urbanas, el uso de la correa es obligatorio en áreas públicas.
- Te permite ir con tu mascota siempre que puedas llevarlo.
- ¿Cómo entrenarlo usando la correa?
El primer paso es acostumbrar a tu perro a usar un collar bien puesto, tiene que sentirse cómodo y no debe ajustarle demasiado. No permitas que la agitación inicial del perro te haga desistir, excepto que esté demasiado ajustado. El collar debe estar puesto de modo que el perro no pueda quitárselo. Revísalo con regularidad para comprobar que te quepan dos dedos entre el collar y el cuello del animal. Asegúrate de quitárselo si metes el perro en la casita.
Después que tu mascota se haya acostumbrado a usar el collar, sigue estos pasos para iniciar el entrenamiento.
- Ponle la correa y deja que el perro recorra la casa con ella, bajo tu supervisión.
- No tires de la correa ni trates de obligarlo a salir cuando se resista. Agáchate hasta el nivel del perro, llámalo con una voz alegre y ofrécele una galleta o un juguete para atraerlo.
- Guía al perro hasta el sitio señalado para hacer sus necesidades. Si se resiste, usa un juguete o una galleta o golosina para atraerlo.
- Asegúrate de soltarlo un poco y premiarlo cuando vaya en la dirección correcta. Más que cualquier otra cosa, eso le indicará que hizo una buena elección.
- Lo habitual es caminar llevando al perro por el lado izquierdo; acostúmbralo. Felicítalo y prémialo cada vez que se mantenga en esa posición.
- Estimula mucho a tu mascota para que esté pendiente de ti cuando vayan a caminar. Dale órdenes y háblale. ¡Diviértanse!
Si lo deseas, puedes iniciar la enseñanza de la orden “Al pie”, cuando empieces las caminatas. Cuando el perro esté a tu izquierda, comienza a caminar. Cuando se aleje o trate de adelantarse, dile “Al pie” y regrésalo a la posición correcta. Si está detrás de ti, te alcanzará. Puede que necesites recoger la correa un poco mientras le das la orden y refuerzas su significado. Lee las instrucciones sobre Órdenes de adiestramiento canino para saber más sobre esta orden. Esta es una actividad con la que muchas personas tienen que enfrentarse. Encontrar un buen lugar de adiestramiento local te puede ayudar a enseñarle este comportamiento básico, pero muy útil.
- ¿Cómo ejercer un correcto liderazgo con tu perro?
- Tu perro pretenderá que ejerzas un liderazgo efectivo sobre él. Ser un buen líder significa brindarle a tu perro estructura y orientación. Puedes pensar que la rutina es tediosa, pero ayuda a que tu perro entienda su mundo, se sienta tranquilo y permanezca alejado de los problemas. Aquí encontrarás algunas sugerencias:
- Cuando interactúes con tu perro, sé amable y coherente.
- Enséñale a tu perro a controlar su boca. Si te mordisquea o ejerce presión con su boca, reacciona con un severo “¡Sin morder!”. Esto le enseñará que no eres otro perro y que debe tratarte de manera diferente.
- Ordénale “Siéntate” o “Abajo” antes de darle lo que él quiere, desde caricias hasta arrojarle un juguete. Cuando te responda a ti antes de que tú le respondas a él, comenzará a esperar que establezcas las reglas y al mismo tiempo obtiene su práctica diaria de adiestramiento.
- Toma con delicadeza las orejas, la boca y las patas de tu perro así aprende a aceptar este comportamiento. Comienza cuando es muy joven y durante breves períodos de tiempo. Permanece relajado durante estos ejercicios, haz que sean un juego. Felicítalo y recompénsalo con golosinas. Estos ejercicios no presentan dificultad en la mayoría de los perros pero si tu perro forcejea y se altera, consulta con tu veterinario o busca asesoramiento con un adiestrador calificado lo antes posible.
- Utiliza diferentes tonos de voz para comunicar mensajes distintos. Un tono más agudo del normal es emocionante y divertido, perfecto para elogios y felicitaciones. Un tono normal, directo y seguro, es tu tono para impartir órdenes. Una tono de voz más bajo es una advertencia porque el perro la asocia a un gruñido. Con práctica, tu perro puede aprender a entender tu estado de ánimo mediante tu tono de voz.
Recuerda que los perros aprenden con la práctica y la repetición. ¡Sé paciente! Si actúas de este modo con coherencia, tu perro se convertirá en un compañero amigable, bien equilibrado y con buenos modales.
- ¿Querés viajar con tu perro? ¡Te decimos como hacerlo!
- Si estás planeando viajar con tu perro, primero deberás preguntarte si tiene sentido llevar a tu compañero canino. Muchos perros adoran viajar y muchos otros lo pueden tolerar, pero hacerlo volar durante muchas horas sólo para que permanezca en su casita una vez que arriben no es justo para ninguno de los dos.
- Antes de viajar
- Comunícate a tu lugar de destino y asegúrate que tu perro sea bienvenido en el sitio en donde te hospedes.
- Visita a tu veterinario, asegúrate que sus vacunas estén al día y consigue copias actualizadas de los registros sanitarios para tu viaje. Es importante que tu veterinario confirme que el perro se encuentra en buenas condiciones de salud para viajar.
- Averigua si existe algún problema sanitario en particular (es decir, insectos, frío, calor) en el lugar de destino y toma las precauciones necesarias.
- Empacando para el viaje
- Lleva los certificados de salud y de vacunación contra la rabia de tu perro (se necesitan al cruzar algunas fronteras).
- Lleva una foto a color reciente de tu perro para identificarlo si se pierde.
- Pon en la maleta su plato de comida, el bebedero, la correa, los juguetes, la casita, los medicamentos y el equipo de aseo.
- Debes llevar su alimento si viajas en auto o si no estás seguro de conseguirlo en el lugar de destino. Los cambios de dieta repentinos pueden producir trastornos digestivos y arruinarles el viaje tanto a ti como a tu mascota.
- Asegúrate que tu perro tenga colocadas sus placas de identificación, con tu información de contacto y preferentemente la del lugar de destino.
- Viajes por tierra
- Es mejor tener una casita o portador para el perro en la parte trasera de tu vehículo. No lo expongas en forma directa a la luz del sol.
- Si tu perro se encuentra fuera del portador, asegúrate de que tenga el cinturón abrochado. Existen a la venta arneses especiales que se unen al cinturón de seguridad. No utilices una correa, si la marcha se detiene repentinamente, se podría producir una lesión seria.
- No dejes a tu perro en la caja abierta de una camioneta.
- No alimentes a tu mascota desde al menos 3 horas antes de emprender el viaje.
- Durante las paradas, ofrécele a tu perro agua fresca para beber. También puedes recompensarlo con una golosina por ser tan buen compañero de viaje.
- Alimenta a tu perro poco después de arribar a tu lugar de destino o cuando te detengas por el resto del día.
- Siempre colócale una correa antes de permitirle salir del vehículo.
- NUNCA dejes a tu mascota sola en un vehículo cerrado. El calor y la insuficiente circulación de aire pueden rápidamente provocar un estrés por calor o incluso la muerte.
- Viajes por aire
- Intenta evitar los períodos de mayor actividad para viajar cuando las demoras y las escalas son más prolongadas.
- Planifica un viaje con la menor cantidad posible de paradas y transbordos.
- Realiza las reservas hoteleras y aéreas para tu perro con bastante antelación.
- Algunas compañías aéreas permiten (generalmente con un costo adicional) que los perros pequeños viajen con sus dueños si el portador cabe debajo de su asiento. De otro modo, alquila o compra un portador o casita que cumpla con las reglamentaciones de la compañía aérea y colócale una etiqueta adhesiva con la leyenda ANIMAL VIVO. Escribe tu nombre y dirección y el nombre de una persona a quien se pueda contactar por tu perro en el lugar de destino si fuese necesario.
- Coloca un almohadón o una manta sobre la base de la casita. Adosa un bebedero con agua a la puerta de la casita. El recipiente deberá ser profundo y no deberá estar muy lleno de agua para evitar que se derrame.
- El día del vuelo, lleva a tu perro a un largo paseo antes de salir para el aeropuerto.
- Al finalizar el viaje, recoge a tu mascota de inmediato.
- En algunos lugares extranjeros, tu perro podría pasar algún tiempo en cuarentena. Averigua con tu agente de viajes o el consulado del país al cual planeas viajar sobre este tema.
- En el lugar de destino
- En el lugar de vacaciones, cumple con todas las reglamentaciones referidas a las mascotas. Deja a tu perro en una casita, portador o espacio restringido cuando lo dejes solo. Recoge rápidamente sus desechos. Tu consideración ayudará a que las mascotas sigan siendo bienvenidas como huéspedes.
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